La temperatura alcanzada por los radiadores en una casa viene determinada por la propia temperatura del agua que circula por ellos.
En la inmensa mayoría de las calderas modernas es posible ajustar la temperatura máxima que queremos que alcance el agua al ser calentada.
La recomendación, dependiendo del fabricante o marca de la caldera, suele oscilar entre los 50º y 60º centigrados, por lo que la temperatura que alcanza un radiador va a ser ligeramente inferior a esa cifra.
Estos datos son generales, ya que van a depender del tipo de caldera (gasoil, pellets, madera, …) y del tipo de radiadores que tengamos instalados en nuestro hogar.
Si nuestros emisores térmicos son de baja temperatura posiblemente oscilen entre los 40º y los 55º, mientras que si contamos con radiadores de aluminio es mas fácil que lleguen hasta los 65º.
¡Ojo! Estas temperaturas son las recomendadas por los fabricantes, sin embargo, las calderas pueden calentar el agua a 70º, 80º e incluso sobrepasar estas cifras, por lo que siempre hemos de tener precaución al tocar o colocar algún objeto encima de un radiador.
Como vemos, los radiadores, pueden alcanzar temperaturas bastante elevadas, por lo que debemos observar ciertas precauciones:
No cubrir los radiadores
Los radiadores están diseñados para disipar el calor y conseguir calentar lo antes posible nuestro hogar u oficina, por lo que si los cubrimos (además de poder dañar los objetos que pongamos sobre ellos) no obtendremos el máximo rendimiento de nuestro sistema de calefacción.
Mantener separación con los muebles
Igualmente, la temperatura alcanzada por los radiadores puede llegar a dañar los barnices y materiales que componen nuestros muebles, por lo que hemos de mantener una separación de, al menos 20 centimetros entre ellos.
Así también conseguiremos que el aire circule correctamente y caliente lo antes posible nuestras estancias.
No utilizarlos como secadores de ropa
No es recomendable utilizar los radiadores como secadores de ropa.
No están diseñados para este proposito y pueden dañar los tejidos, a menos que estemos hablando de calienta toallas como los que ves a continuación:
